14.4.10

58 bares

Zenón.
- Buenas.
- ¿Por aquí otra vez?
- Sí, hoy no tengo ganas de subir pa la plaza. Me quedaré por aquí. Oye ¿Cuántos bares habrá allá arriba?
- Yo que sé, yo no subo y menos a los bares, ya tengo bastante con atender a éste.
- Hombre, pero más o menos.
- Más o menos... como seis.
- Pues eso, prepara seis rondas.
- ¿Y por qué nos subes?
- La puta de la pierna, cada vez que llueve ni bastón ni , es un dolor que me entra por el hueso y baja a la rodilla que deja pal arrastre.
- Quizá no deberías salir de casa.
- Quita, anda ponme de beber, cocacola, light. Desde el ataque ni el azúcar puedo catar.
- ¿Sola? Se te va a hacer larga la tarde.
- Bueno, bautízala un poco, na más para quitarle un poco el sabor.
- ¿Dyc?
- Ya lo sabes. Y si en la plaza hay seis bares ¿en todo el pueblo? La de ellos que habrá, de joven salía todos los días y recorría cada uno antes de irme a casa, ahora no puedo pasar de la carretera pa allá, no me sostienen los zapatos.
- Toma, ¿quieres un pincho?
- ¿queda magro?

La luz del sol de la tarde entraba por las cristaleras ahumadas por años de servicio. El viejo, de espaldas, bebe sin prisas y piensa mirando a sus pies, levanta la vista y alarga su mano al plato que le ofrece el camarero.

- Cincuenta y ocho.
- Cincuenta y ocho ¿qué?
- Bares, cincuenta y ocho bares, con el último que han abierto, a ver si un día de estos voy a conocerlos.

    No hay comentarios: